miércoles, 12 de septiembre de 2012

NI TRABAJO NI FORMACIÓN

La Comunidad de Madrid ha decidido reducir el importe destinado a la formación para los desempleados en un brutal porcentaje del 90%, que deja absolutamente desamparados a los 530.000 desempleados que arrojan las últimas cifras de paro registrado en el mes de agosto de este año en esta Comunidad.
La medida es tan devastadora, sobrecoge de tal manera, que los profesionales de la formación que llevamos muchos años impartiendo cursos para los desempleados, no salimos de nuestro asombro ante una medida de tal magnitud que impacta por los estragos que va a causar en un gremio tan maltratado como el de los desempleados, que de esta forma ni podrán encontrar trabajo ni tendrán acceso a una formación que les capacite en unos casos y que les actualice en otros.
Paso a dar unas escalofriantes cifras que ilustran a la perfección cuanto vengo afirmando: el año 2011, el importe de las subvenciones para la formación de desempleados fue de 84.500.000 €, que permitieron formar a decenas de miles de parados a través de más de 10.000 cursos de múltiples especialidades.
Pues bien. Este año 2012, la subvención será de 8.500.000 €, es decir, un 10%, respecto al año anterior o lo que es lo mismo, una reducción del 90%, lo cual deja perplejo a los Centros de Formación, pero sobre todo a los trabajadores que deben saber que tienen pleno derecho a esa formación, subvencionada con la aportación que en las nóminas se hace en concepto de formación profesional, de los Agentes Sociales, el Servicio Público de Empleo Estatal y del otro 50%, que aporta la Comunidad Europea, que por cierto desearíamos saber adónde ha ido a parar.
Hasta el año pasado, los parados podían optar a formarse eligiendo entre cientos de especialidades diferentes cuya duración variaba desde las 150 horas de un curso elemental a las 600 horas de un curso especializado, obteniendo a su finalización un diploma que certificaba de esa preparación, y que últimamente estaban siendo sustituidos por Certificados de Profesionalidad, con cierta validez académica, reconocidos por la autoridad laboral Española y por la Comunidad Europea.
Pues se acabó. Todo se reduce a ese 10% que se va a invertir en 1.700 cursos de formación en una única especialidad: Idioma, alemán o inglés y punto. Pero no se confundan, no van a impartir 400 ó 500 horas del idioma que elijan, con el objeto de que la preparación sea la correcta, la oportuna, o sea, para que dominen mínimamente esa lengua: serán cursos de 100 horas. Sin comentarios.
Juegan con ventaja, saben que los desempleados, por desgracia, es un sector que no se organiza, que no protesta, que en definitiva no crea problemas, no va a salir a la calle, no la va a montar ni son alborotadores que puedan complicarles la vida. Por lo tanto, ahí queda eso, ni en las aulas ni en el trabajo. Eso sí, algunos podrán aprender cómo se dice hola y adiós en inglés y en alemán. Ahí queda eso.

1 comentario:

Bugui dijo...

Muy muy bueno,lo he compartido en mi Twitter para que todo el mundo lo sepa.